UPyD quiere recortar competencias a la Generalitat
El candidato de Unión Progreso y Democracia (UPyD) a la presidencia del Gobierno catalán, Antonio Robles, apuesta por suprimir la consejería de educación de la Generalitat, entre otras, y devolverla al Estado. En palabras de Robles, la educación en las Comunidades Autónomas, particularmente en Catalunya, se ha instrumentalizado con fines identitarios. Por otro lado, el cabeza de lista por Barcelona criticó a los grandes partidos, como el Partido Popular o el Partido socialista, por no saber defender el Estado.
“No pueden existir 17 modelos de educación”. Así justificó Robles la devolución de las competencias en educación al Gobierno central. Para el candidato, la educación se ha utilizado para separar, y no unir. Lo cual sólo puede desembocar en el fracaso escolar e “infectar la mente con ideas que rechazan a las otros”. Es por ello que el partido que lidera Rosa Díez defiende una educación que esté al servicio de España. En la lista de competencias que deberían ser devueltas al Estado, también incluyen la política exterior. De esta forma se eliminarían las oficinas comerciales que ha abierto la Generalitat en diferentes países. Gestión del territorio, sanidad, justicia y servicios sociales también deben ser gestionados por el Estado, ya que son aspectos fundamentales que afectan a todos los ciudadanos.
Robles también tuvo tiempo de criticar en su discurso al resto de partidos, que los acusó de no defender el Estado. El ex – diputado por Ciutadans tachó al PP y PSOE de ser partidos que habían dejado de ser nacionales al pactar con partidos nacionalistas. Y erigió a su partido como el único garante del Estado. Si bien es cierto que defienden un modelo distinto basado en lo que ellos llaman, federalismo cooperativo. Un modelo de estado en el que las comunidades tuvieran las mismas competencias. De esta forma, pretenden acabar con algunas particularidades, como el concierto económico en el País Basco, que ellos califican de privilegios.
En materia de pactos políticos, Robles no concretó ninguna posible alianza con ninguna fuerza política. Pero si impuso condiciones a la hora de establecer coaliciones, como la ya mencionada devolución de la consejería de educación, o la reforma de la ley electoral. Sin embargo, no descartó apoyar puntualmente a algún partido, inclusive Esquerra Republicana de Catalunya o PP, en el caso de que éstos propusieran leyes favorables a la ciudadanía.
“No pueden existir 17 modelos de educación”. Así justificó Robles la devolución de las competencias en educación al Gobierno central. Para el candidato, la educación se ha utilizado para separar, y no unir. Lo cual sólo puede desembocar en el fracaso escolar e “infectar la mente con ideas que rechazan a las otros”. Es por ello que el partido que lidera Rosa Díez defiende una educación que esté al servicio de España. En la lista de competencias que deberían ser devueltas al Estado, también incluyen la política exterior. De esta forma se eliminarían las oficinas comerciales que ha abierto la Generalitat en diferentes países. Gestión del territorio, sanidad, justicia y servicios sociales también deben ser gestionados por el Estado, ya que son aspectos fundamentales que afectan a todos los ciudadanos.
Robles también tuvo tiempo de criticar en su discurso al resto de partidos, que los acusó de no defender el Estado. El ex – diputado por Ciutadans tachó al PP y PSOE de ser partidos que habían dejado de ser nacionales al pactar con partidos nacionalistas. Y erigió a su partido como el único garante del Estado. Si bien es cierto que defienden un modelo distinto basado en lo que ellos llaman, federalismo cooperativo. Un modelo de estado en el que las comunidades tuvieran las mismas competencias. De esta forma, pretenden acabar con algunas particularidades, como el concierto económico en el País Basco, que ellos califican de privilegios.
En materia de pactos políticos, Robles no concretó ninguna posible alianza con ninguna fuerza política. Pero si impuso condiciones a la hora de establecer coaliciones, como la ya mencionada devolución de la consejería de educación, o la reforma de la ley electoral. Sin embargo, no descartó apoyar puntualmente a algún partido, inclusive Esquerra Republicana de Catalunya o PP, en el caso de que éstos propusieran leyes favorables a la ciudadanía.
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